Perderse por Sevilla: 8 calles con encanto (Parte I)

Monumentos

Sevilla va equiparándose cada vez más a una gran ciudad moderna, con ritmos de vida más acelerados, monumentos del siglo XXI y grandes cadenas de establecimientos internacionales por doquier. A pesar de este cambio en la morfología y en la forma de vivir de Sevilla, siempre encontramos rincones que aúnan pasado, presente y futuro, calles atemporales donde se respira la esencia de la ciudad hispalense.

Hoy os hablamos de calles muy especiales de la ciudad:

  1. Calle Sierpes

Esta calle Sierpes es uno de los emblemas sevillanos, dice una canción “me da igual cantar en Sierpes que en la Plaza Nueva…”. Sierpes es una calle llena de comercios y bares, a pesar de que sus dimensiones no son muy grandes, situada en pleno corazón del centro histórico sevillano.

Su nombre hasta el siglo XV fue calle Espaderos, por la gran cantidad de comercios de espadas que aquí se situaban. Y entonces se cambió su nombre por calle de la Sierpe. Hay varios motivos acerca de este cambio de nombre, y os vamos a contar los favoritos de los sevillanos.

En primer lugar se cree que como la calle no es recta sino que “serpentea”, se le llamó de la Sierpe porque pasear por este rincón era como andar siguiendo las curvas de una serpiente hecha calle.

Otra versión nos cuenta que la Cruz de la Cerrajería, emplazada en esta calle hasta el siglo XIX, da el nombre a esta vía porque en la base de la escultura se pueden ver 8 serpientes o dragones.

Pero por supuesto, Sevilla es ciudad de leyendas, y esta calle no está libre de ellas. Se cuenta que en el siglo XV muchos niños empezaron a desaparecer en la antes llamada calle Espaderos. Un reo que había huido de la cárcel dijo que sabía quién era el asesino, cuyo nombre daría a cambio de ser libre y no prófugo como hasta ahora. Una vez conseguida su libertad, llevó al comendador y a un grupo de hombres armados al subsuelo sevillano y encontraron muerto al culpable rodeado de múltiples cadáveres de críos. El asombro de aquellos que lo vieron fue descomunal: el devorador de niños era una serpiente del tamaño de un basilisco. Expusieron el cuerpo sin vida del animal durante un tiempo, dándole el nombre de La Sierpe a la antigua calle Espaderos.

  1. Calle Betis

No hay sevillano que no haya parado en la trianera Calle Betis, especialmente en la época estival cuando el sofocante calor de la capital andaluza se ve aliviado por la brisa fluvial que el Guadalquivir ofrece como presente a las terrazas de esta calle.

Llena de bares de tapas y bares donde pasar una noche amena, la belleza singular de este lugar situado a la otra orilla del río entre los puentes de San Telmo y de Triana, entre la Plaza de Cuba y la Plaza del Altozano, se ve completada con las vistas del centro histórico sevillano.

Mientras que disfrutáis de un refrigerio, podéis deleitaros con las vistas de las Torres de Plaza de España, la Torre del Oro, el Teatro de La Maestranza, la parte más alta de la Giralda y la Plaza de Toros.

Y por supuesto, el nombre de calle Betis no tiene nada que ver con el equipo de fútbol sino con el río Guadalquivir, que en época romana era llamado Betis o Baetis.

  1. Avenida de la Constitución

La Avenida de la Constitución a día de hoy conecta la Plaza Nueva con Puerta de Jerez, y paseando por ella podemos ver algunos de los edificios más impresionantes de Sevilla.

En época romana, esta avenida quedaba fuera de la muralla protectora de la ciudad y por una parte de ella corría un brazo del río Guadalquivir que venía de la Alameda de Hércules.

Su apariencia actual la toma a principios del siglo XX, cuando se van a construir edificios de una belleza especial con motivo de la Exposición Iberoamericana.

Entre estos nuevos edificios cabe destacar el que se enfrenta al Banco de España, una construcción neomudéjar obra de José Espiau Muñoz hecho para la Compañía de Seguros la Adriática.

El mismo Banco de España es otro de los monumentos impactantes, así como pegando a Puerta de Jerez vemos el antiguo Teatro Coliseo, espectacular edificio regionalista donde aún a día de hoy se puede ver lo que en su momento fueran las taquillas.

Pero por supuesto, no todos los edificios que se ven en esta Avenida son del siglo XX, encontrando también aquí la fachada principal de Santa María de la Sede que es la Catedral Gótica más grande del mundo y la entrada del Archivo General de Indias. Estos dos edificios son visitables a día de hoy y a continuación os informamos de los horarios de visita y los precios.

Respecto a la Catedral de Sevilla, está abierta al público con el siguiente horario:

Lunes de 11.00 a 15.30

Martes a sábado de 11.00 a 17.00

Domingos de 14.30 a 18.00

El precio de la entrada general para la Catedral de Sevilla es de 9€ y la entrada reducida para pensionistas y estudiantes menores de 25 años es de 4€. La entrada es gratis para los sevillanos

Y cómo no, la Catedral también ofrece un horario para visitas completamente gratuitas, a saber, los lunes de 16.30 a 18.00.

Si no queréis esperar cola, podéis comprar las entradas online desde la web de la Catedral de Sevilla o comprar la entrada al mismo precio en la Iglesia del Salvador, a 5 escasos minutos de la Giralda.

Respecto al Archivo General de Indias la visita es libre y gratuita, siendo los horarios de martes a sábado de 9.30 a 17.00 y domingos y festivos de 10.00 a 14.00.

Esta es sólo la primera parte de algunas calles importantes de Sevilla, busca el siguiente artículo para infórmate de todo y por supuesto, recuerda que Sevilla Free Tours ofrece visitas guiadas de mano de historiadores que os contarán todos los secretos de Sevilla. Somos los guías del paraguas amarillo y empezamos todos los días a las 10.00 en Plaza Nueva.

 

Este Sitio Utiliza Cookies. Usted Puede Leer En Nuestra Política De Cookies. Aceptar