Sevilla no solo fue un crisol de culturas, hoy en día, cada una fue dejando en la historia de la ciudad su huella. Realmente hablar de la ciudad, su evolución, historia y proyección al mundo, es algo que corre al lado indivisible de su artesanía.
La maestría de ceramistas, alfareros y plateros es quizá uno de los patrimonios inmateriales menos conocidos de la ciudad. Y hoy te contamos porque.
1 Cerámica, alfarería y el barrio de Triana: Si Sevilla se reconoce por sus calles encaladas y colores vibrantes, todo contrasta con otra tradición llegada de tiempos islámicos y que hoy en día encuentra su exponente en el barrio de Triana.
Esta cerámica es famosa por sus azulejos con motivos florales ( típica relación con el ataurique árabe) y geométricos, junto con colores como rojo, azul y amarillo.
Prueba de este legado es que, como patronas del barrio, Triana tiene a Santa Justa y Rufina, alfareras cristianas que convivieron con los romanos y fueron martirizadas por la defensa de su fé.
Esta evolución en la cerámica sevillana inundó la ciudad y la embelleció para la exposición Iberoamericana de 1929. De estilo regionalista o modernista, edificios como el Teatro Coliseo, la Torre del Oro o la Plaza de España son un ejemplo perfecto de ello.
Otra variante de esta cerámica es la vidriada que podemos ver, en mayor cantidad pero al mismo tiempo que la cerámica en sí, en objetos de uso cotidiano como platos, vasos o incluso teteras.
2 La plata
El uso de la plata en Sevilla puede ir desde el ornamento de la ciudad como del embellecimiento de lugares y elementos de culto religioso. De este último se encuentran ejemplos en las hermandades y cofradías de la ciudad, como candelabros, incensarios y ornamentos para los cristos y vírgenes.
Durante la época industrial, una de las fábricas más importantes fue precisamente la Real Fábrica de la Platería, creando piezas de lujo para eventos reales o ceremonias.
Junto a la platería se han creado un tipo de joyas que incluso ya en el sXVI robaron el corazón a Carlos V. El monarca se inspiraría en esta artesanía sevillana para redecorar el que sería nuestro actual ayuntamiento. Conociéndose este nuevo estilo como Plateresco en la arquitectura.
3 Esparto y cestería.
Como medio rural, la zona andaluza siempre se ha servido de productos, plantas y elememtos locales. Junto a la piedra calcarenita o arenisca, uno de los productos más típicos es el esparto.
Puede que por su densidad y rechazo del calor, pero la cestería, alfombras, persianas ( que hoy en día suelen verse en cualquier barrio para soportar las altas temperaturas en los meses estivales) e incluso muebles siguen formando parte de la vida rural y se han convertido en una parte fundamental del patrimonio artesanal sevillano.
4 Bordado
Durante la Semana Santa, junto al incienso y la platería de cada cofradía, los nazarenos acompañan a las imágenes que mantienen diferentes mantos y estandartes bordados a mano con hilos de oro y plata.
5 Cuero y marroquinería
Si algo caracteriza a aquellas áreas en la que los musulmanes dejaron huella ese es el trabajo del cuero. Desde la Edad Media, el trabajo combinado de costura y curtidos de la piel han resuelto un papel fundamental en tradiciones como puede ser el baile flamenco. donde los zapatos son realizados con esta técnica.
Con este trabajo del cuero, quizá destaque la guarnicionería que relaciona con la tradición ecuestre con elementos como monturas o cabezales, aunque en la actualidad, tiene una función más estética que en tiempos pasados.
6 Sastería y esparto, flamenco y feria de Abril en estado puro.
Mientras los zapatos que sobreviven a las largas tardes de albero de Abril se asientan sobre suelas de esparto, la sastrería sevillana convirtió la antigua bata de faena gitana en el traje típico de toda una provincia.
7 Forja, entre la guerra y lo cotidiano
Los gitanos, como pueblos errantes, trajeron junto al traje, un trabajo de la forja envidiable. No solo ayudaría, enfocado en la guerra, a los Reyes Católicos, sino que hoy en día se puede encontrar en la decoración de enrejados y balcones de los barrios más castizos. Con yunke, martillo y algo de fuerza y maña, el metal coge forma y parace fluir con el día a día de la ciudad,pasando por el Hotel Alfonso XIII o la Real Fábrica de Tabacos, actual Facultad de Filosofía y letras.
Como muestra de la artesanía de la región se puede visitar a dia de hoy la calle situada en las cercanías del puente de Triana, conocida como la calle Alfarería, presenta varios talleres de todas las técnicas y tipos de trabajo que se han presentado en esta artículo.
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